jueves, 17 de diciembre de 2020

"Instagram es una máquina de frustración. Hay niños deprimidos en el sofá y eso hay que analizarlo"
Por Alberto García Palomo




Berta Bernad abandonó las redes sociales en un pico de popularidad, escribió un libro sobre ese universo y ahora da charlas sobre cómo afectan emocionalmente.

Con 28 años, Berta Bernad dijo adiós. No se quitó la vida como tal, pero sí eliminó su perfil en Instagram, que para mucha gente es prácticamente similar. Superaba los 100.000 seguidores. Estaba bendecida por gente como Scott Schuman, cazador de tendencias. Habían ido creciendo a lo largo del tiempo gracias a su imagen cotidiana y a sus apuntes de moda. Lo que en el gremio se etiqueta como lifestyle.

Todavía no se usaba la palabra influencer, pero ya era una. Su legión de fans escribía sobre cada cosa que subía a la plataforma y dedicaba el día entero al móvil. Era un oficio sin tiempos muertos. Y terminó siendo una frustración: soportar ese nivel de exposición le llevó a esa decisión de despedirse. Para siempre.

Volvió de otra forma. Dos años después, en 2019, publicó Mi nombre es Greta Godoy en la editorial Planeta. Su protagonista era una mujer que decide salirse de Instagram al llegar a los dos millones de seguidores. ¿Les suena? Usó experiencias e ingredientes de la ficción para confeccionar esta trama que advierte sobre las falsas apariencias o la búsqueda de uno mismo.

Ahora, a los 32 años, da charlas sobre el asunto en la Fundación Lo Que De Verdad Importa y otros organismos, aparte de continuar en el mundillo con Mindlike, agencia que crea estrategias digitales para grandes marcas. Habla con Sputnik tras una mudanza, a ratos. Hasta que en un rato largo consigue finalizar la charla. Le ha costado encontrar ese hueco para hablar, a pesar de sentirse, en general, "liberada".

— Cuando empezó a ser 'influencer' apenas existía esa palabra. ¿Qué significaba entonces y en qué se ha convertido?

— Empecé cuando no existía la palabra, efectivamente. Antes se era blogger o It girl. Tenía un blog con dos amigas donde subíamos fotos de ropa que comprábamos en Berlín, Londres o París. Poco a poco fue ganando visitas y decidí seguir. Había hecho periodismo y todo lo que tenía que ver con fotos o escribir me divertía muchísimo. Y el propio fenómeno digital era muy bonito y a la vez muy orgánico. Ya estaba en mí. Instagram fue un medio nuevo para volcarlo.

— Le he oído decir que la gente y uno mismo ve pasar como "la película de su vida" en una pantalla. ¿Qué supone esa vida virtual? ¿Qué aporta y que te quita?

— Para mí, la vida virtual aporta mucho a nivel inspiración. Puedes viajar desde tu móvil, conectar con gente que físicamente está muy lejos de ti o abrir tu propia marca. Pero eso, a la vez, ha provocado que haya una saturación en el mercado. Hemos ganado en cercanía y rapidez, pero quizás hemos perdido la capacidad de estar tranquilos, de no hacer nada. Yo todavía navego muchísimo y lo utilizo mucho, como espectadora. Es la única cosa en la que invierto muchas horas y pasan como un segundo. Eso es lo peligroso.

​— ¿Cuántas horas le dedicaba a las redes y cómo era más o menos su jornada?

— Le dedicaba el día entero y cada jornada era distinta. Tengo mil frentes abiertos, sin una rutina. Me he acostumbrado desde los 20 años a vivir muy frenéticamente. Estaba desde por la mañana hasta casi la noche. Lo peor para mí, lo que más he agradecido al cerrar mi cuenta de Instagram, era esa necesidad de tener que ir a muchos actos y de recibir muchas cosas. También es que lo dejé a una edad, a los 28 años, en que ya me había aburrido, pero entiendo que haya gente que lo vea y quiera vivirlo.

— En 'Mi nombre es Greta Godoy' se habla de "prisión" y de "inseguridades". ¿Cómo vivió ese mundo?

— Bueno, al final se convirtió en una prisión. Era un lugar donde se vive muy bien porque estás rodeado de lujos materiales (viajes, regalos y todo eso). Pero también toda esa exposición genera una inseguridad que afecta hasta en tu papel social. Cuanto más hablas de tu vida, más apática o tímida te vuelves. Al menos a mí me pasó. Yo era supersociable, pero el hecho de convertir ese don en mi curro terminó siendo negativo.

​— La autora Olivia Sudjic cuenta en 'Expuesta' el fenómeno que vivió tras publicar 'Una vida que no es mía', sobre la fama en las redes, y hace hincapié en la ansiedad que generan. ¿Cómo se lidia con los asociados problemas mentales?

— Lo que recomiendo es que se analice cómo te sientan las redes sociales. No a todos les afectan igual. Lo suyo es que controles no solo el tiempo que pasas en la aplicación sino ver a quién sigues. Incluso apuntar en un papel a esas personas que se sienten inferior, que bloquees durante una época o incluso silencies compromisos que no te apetecen. Necesitas customizar de alguna forma esa plataforma para que no te haga daño. Imagínate que eres una mujer, no puedas tener hijos y ves todos los días fotos de gente con sus niños, pues acabarás con depresión. Creo que eso tienes que saberlo y evitarlo.

— ¿Estamos educados para eso, para una vida virtual que no tiene los mismos parámetros que la física (no hay límites de insultos, no hay horarios, no hay distancias...)?

 — El problema es ese: no hay horarios, no hay distancias, todo el mundo tiene derecho a insultar… Yo no fui una influencer muy cercana, de contar mi vida, porque además me fui cuando empezaban las stories y ya eso es demasiado: tener que poner todo el rato tus tonterías y lo que haces en cada momento. Me parece que ahí empezó El show de Truman de verdad. Para mí era más un currículum virtual donde podía conseguir trabajos y colaboraciones. Yo he vivido una relación más distante. Ahora mismo estamos expuestos a un montón de impactos emocionales y cuesta tanto mantenerse bien. Por eso creo que ha salido esta revolución del yoga, de cuidarse a sí mismo y del estar presente: con todo el jaleo que hay alrededor, es normal que estemos distraídos y dándole importancia a cosas que no la tienen.

— En eso entra la omnipotencia de los dispositivos, que no solo conocen todo de nosotros sino que nos controlan. La socióloga Marina Van Zuylen dice que "vampirizan" nuestra atención. ¿Habría que regularlos o prohibirlos en ciertos casos? ¿Tú llegaste a sentirte adicta o dependiente?

— Instagram ya intenta regular su uso. Te puedes poner alarmas y más avisos. Como todo, es cuestión de educación. Es algo que todavía estamos aprendiendo. Hay mucha gente que me pregunta mil cosas de cómo y cuándo pueden darle un teléfono a su hijo, por ejemplo. Y no hay una respuesta. Realmente, todo hay que verlo en cómo sea esa persona, cómo se integre, cómo sea de sociable, cuál es su necesidad de llamar la atención. Yo creo que no era adicta al móvil (o no me di cuenta), pero sí al qué dirán y a cómo me veía la gente. En mi día a día he tenido que lidiar mucho con mi imagen, con la sensación de que todo lo que hacía era noticia. Y lo que me di cuenta es de que a la gente, aunque comente o te mire todo el rato, no le importa la vida de nadie. Así que si volviera atrás, intentaría controlar más esa franja.

​— ¿Cómo consiguió dejarlo, desaparecer? ¿Es eso lo que trata en sus conferencias?

— Fue muy radical. De la noche a la mañana lo dejé. Llevaba tiempo pensándolo, pero tomé la decisión de repente. Hubo un momento en que no me vi capaz de postear menos. Y hubiera podido volver si me hubiera ido de otra forma. En mis conferencias sobre todo trato e intento fomentar el uso responsable de las redes sociales y el efecto emocional que tienen. Es el mensaje que me encanta promover. Me parece que un fenómeno así, tan grave e importante como el cambio climático o el feminismo, está cambiando el mundo. Hay mucha gente con su hijo deprimido en el sofá por las redes y eso hay que analizarlo.

— Otra palabra que se repite en torno a las redes y la exposición es "frustración". ¿Por qué se produce? ¿Qué supone?

— Porque al final todo el mundo compara su vida con los demás y siente que es peor. En Instagram solo se ve la punta del iceberg de lo que pasa realmente. Y creo que eso lo convierte en una máquina de frustración que te hace querer cosas que no tienes. Además, es una herramienta que no te deja ver lo que ha hecho una persona para conseguir eso. Si lo ha tenido porque sí o si le ha costado perder lazos familiares. No se puede admirar a alguien sin saber nada. No se puede hacer un líder de gente que, como se está viendo, tiene detrás muchísima soledad.

— ¿Qué siente cuando ve noticias de 'influencers' que pasan un trance extremo, como el suicidio o el batacazo de no lograr lo que esperan? ¿Cree que hay poca labor pedagógica en cuanto a este universo?

— Hay que poner el tema sobre la mesa de una manera natural, hablando de ello y que se normalice. Así la gente no tendrá miedo a exponerlo y a saber que su vida va igual. Yo, desde que cerré Instagram, duermo mejor, soy capaz de atender mejor las conversaciones, consumo mucho menos y necesito muchas menos cosas, porque esa necesidad de fotografiar todo lo nuevo te empuja a comprar. Me siento muy liberada.

​— Un daño paralelo es la comunicación. ¿Cómo nos han cambiado estas esferas digitales a la hora de hablar? ¿Y a la hora de enfrentarnos a problemas o a empatizar?

— Han cambiado mucho la forma de hablar, se nota incluso en cómo se verbaliza frente a una cámara. Se ha creado, como dijo Federico Jiménez Losantos en una entrevista que me hizo, un desdoblamiento de la personalidad. Se tiene una vida virtual y otra real. A la hora de enfrentarnos a la realidad, las redes sociales no son el canal. 

— Por último, se decantó por la ficción para hablar de alguien que se borra de las redes. ¿Por qué? ¿Era más fácil para no parecer un testimonio desde la disidencia o a modo de regañina?

— Preferí la ficción porque era más libre de contar lo que le pasaba a este personaje que a veces tiene rasgos de lo que he vivido y otras no. Me tomé la licencia de escribir cosas que no me pasaron y añadir otras que sí, pude jugar más. No hubiera sido capaz de ponerlo en primera persona como un diario si no fuera así. Porque no creo que mi historia sea tan importante. Lo importante es cómo ha cambiado el mundo.



viernes, 11 de diciembre de 2020

Facebook eliminará la desinformación sobre vacunas contra la COVID-19
La red social asegura que borrará cualquier publicación que incluya afirmaciones que hayan sido "desmentidas por expertos en salud pública" por su riesgo de provocar un "daño físico inminente". Se trata de un paso importante, pero que solo tendrá impacto si se ejecuta a gran escala y en grupos privados.
por Abby Ohlheiser | traducido por Ana Milutinovic


Associated Press


La noticia: Facebook ha anunciado que va a eliminar las publicaciones que incluyan afirmaciones falsas sobre las vacunas contra el coronavirus (COVID-19) que hayan sido "desmentidas por expertos en salud pública". Esta publicación describe cómo Facebook planea aplicar su prohibición en torno a la desinformación sobre la COVID-19, con la intención de descartar las publicaciones que podrían conducir a un "daño físico inminente", mientras que los países de todo el mundo se acercan a la adquisición y administración de las vacunas. Las eliminaciones se aplicarán tanto a Facebook como a Instagram.

Ya llegan las vacunas eficaces: el éxito de las vacunas contra la COVID-19 se considera fundamental para superar la pandemia, con varios candidatos en las últimas etapas de los ensayos. A principios de la semana pasada, Reino Unido se convirtió en el primer país en aprobar una vacuna, otorgando una Autorización de Uso en Emergencia del tratamiento desarrollado por Pfizer y BioNTech y aseguró que las primeras dosis podrían administrarse en los próximos días.

¿Qué eliminará Facebook? La información que ha compartido sobre su nueva política no es muy detallada, pero ofrece algunos ejemplos de lo que se eliminaría de la plataforma: 

"Podría incluir afirmaciones falsas sobre la seguridad, eficacia, ingredientes o efectos secundarios de las vacunas. Por ejemplo, eliminaremos las afirmaciones falsas de que las vacunas contra la COVID-19 contienen microchips o cualquier otra cosa que no esté en la lista oficial de ingredientes de la vacuna. También eliminaremos las teorías de conspiración sobre las vacunas contra la COVID-19 que hoy en día sabemos que son falsas, como que se están utilizando poblaciones específicas sin su consentimiento para probar la seguridad de la vacuna".

Entonces, ¿es un paso importante? Sí y no. Resulta importante que Facebook aborde mejor su forma de manejar la desinformación sobre las vacunas, especialmente teniendo en cuenta que estamos entrando en lo que podría ser el momento de salud pública más significativo de la historia moderna. La desinformación sobre las vacunas ha florecido durante mucho tiempo en Facebook, por lo que cualquier cosa que anuncie en términos de prohibición o de mano dura tiene el potencial de ser muy relevante.

El "pero" aquí también es importante y multidimensional. Las políticas de Facebook son efectivas, si se aplican. Con la desinformación sanitaria en especial, estas prohibiciones solo cumplirán sus objetivos si se llevan a cabo de manera efectiva dentro de los muchos grupos privados en Facebook donde se fomentan y amplifican las afirmaciones falsas sobre la salud. Este ha sido el problema con los intentos anteriores de la plataforma de tomar medidas enérgicas contra las falsedades perjudiciales.

La aplicación desigual: incluso después de que Facebook comenzara a aplicar sus políticas para limitar la propagación de desinformación sobre las vacunas en 2019, restringiendo, por ejemplo, las recomendaciones de algunos grupos y hashtags que promovían dichos mensajes, el ecosistema antivacunas continuó creciendo en los espacios privados de la plataforma.

Sin embargo, desde la pandemia, Facebook ha tomado una actitud más agresiva para eliminar cierta desinformación sanitaria, citando su política contra el contenido que podría provocar un daño físico inminente. Hace unas semanas, Facebook bloqueó al destacado activista antivacunas Larry Cook y a un enorme grupo de Facebook que dirigía, por violar sus políticas sobre la teoría de la conspiración de QAnon.



Todos los detalles de la demanda antimonopolio contra Facebook
La Comisión Federal de Comercio de EE. UU. afirma que la red social actúa de forma anticompetitiva y con métodos de competencia desleal. Tras un movimiento similar reciente contra Google, parece que el mundo empieza a tomarse en serio la gravedad del enorme poder que han acumulado las 'big tech'.
por Eileen Guo | traducido por Ana Milutinovic


AP Photo/Andrew Harnik.


Qué ha pasado: la Comisión Federal de Comercio de EE. UU. (FTC, por sus siglas en inglés) ha presentado una demanda antimonopolio contra Facebook por su "conducta anticompetitiva y sus métodos de competencia desleal". Eso incluye la adquisición de Instagram en 2012 y la compra de WhatsApp en 2014. Facebook, según alega la FTC, tiene el monopolio de las redes sociales. 

En su demanda, la FTC afirma: "Desde que derrocó a su primer rival, MySpace, y consiguió el poder de monopolio, Facebook se ha dedicado a jugar a la defensiva mediante prácticas anticompetitivas. Al identificar dos importantes amenazas de competencia a su posición dominante, Instagram y WhatsApp, Facebook actuó para sofocar esas amenazas comprando las empresas, en un reflejo de la opinión del CEO, Mark Zuckerberg, expresada en un correo electrónico de 2008, de que 'es mejor comprar que competir'".

Cómo hemos llegado hasta aquí: el control regulatorio que EE. UU. ejerce sobre Facebook empezó a aumentar en 2017, cuando se descubrió que la empresa de datos políticos Cambridge Analytica había usado datos de usuarios de Facebook sin su consentimiento en el período previo a las elecciones presidenciales de 2016 en EE. UU. 

La FTC comenzó su investigación sobre las políticas de privacidad de Facebook en marzo de 2018, lo que resultó en una multa de 5.000 millones de dólares (4.130 millones de euros). Aunque se trata de la mayor multa en la historia de una empresa tecnológica, solo representó alrededor del 9 % de los ingresos de la compañía en 2018, y fue criticada rotundamente por las organizaciones de activistas y legisladores demócratas porque no incluía ninguna condición que exigiera a Facebook cambiar sus prácticas empresariales. 

En los últimos meses, el control ha ido en aumento. Durante el verano, los demócratas de la Cámara de Representantes de EE. UU. publicaron un informe de 449 páginas sobre las prácticas monopolísticas de Apple, Amazon, Facebook y Google, en el que abogaban por una mayor aplicación de la legislación antimonopolio. 

Luego, en octubre, el Departamento de Justicia de EE.UU. presentó una demanda antimonopolio contra Google, argumentando que la empresa utilizó métodos ilegales para expandir su negocio de búsqueda y publicidad. 

Por qué es importante: la demanda del Departamento de Justicia de EE. UU. contra Google ya era el mayor caso de monopolio en los últimos 20 años, y las demandas conjuntas de la FTC y los estados van, como mínimo, a la par. 

La última demanda, que se unió a la otra separada de 47 estados de EE. UU., junto con Guam y el Distrito de Columbia (ambos en EE. UU.), tiene grandes repercusiones para Facebook y podría obligar a la empresa a vender Instagram y WhatsApp. Pero, también presagia un entorno más amplio y cada vez más crítico con el dominio de un puñado de gigantes tecnológicos.

Estos casos podrían tardar años en acabar en los tribunales, pero, se avecinan más demandas. Los fiscales generales estatales han afirmado que presentarán sus propias demandas contra Google en las próximas semanas, además de continuar con la investigación adicional de Amazon y Apple.



viernes, 6 de noviembre de 2020

Medios estadounidenses cortaron el discurso de Donald Trump
MSNBC, NBC y ABC interrumpieron la palabra del presidente y hasta Fox News criticó sus dichos.


MSNBC, NBC News y ABC News interrumpieron la transmisión en directo de la palabra de Trump. Imagen: EFE


El discurso que dio Donald Trump este jueves evidenció cómo las cadenas periodísticas de mayor peso le dieron la espalda al presidente. Mientras hablaba, varias cadenas de televisión interrumpieron su transmisión por considerar que el discurso del magnate propiciaba la desinformación.

Ocurrió en momentos en que el mandatario insistía con sus denuncias infundadas de fraude, particularmente cuando habló de “votos legales” e “ilegales”, en referencia a los que se emitieron por correspondencia.

MSNBC, NBC News y ABC News interrumpieron la transmisión en directo. El presentador, Brian Williams, de MSNBC, cortó el monólogo de Trump y dijo: "Bueno, aquí estamos nuevamente en la posición inusual de (tener que) no solo interrumpir al presidente de Estados Unidos, sino también corregir al presidente de Estados Unidos".

La CNN, que mantuvo largos entredichos con Trump, emitió totalmente lo que acabó no siendo una rueda una rueda de prensa, pero al volver la transmisión al piso, su presentador Jake Tapper criticó: "¡Qué noche más triste para Estados Unidos de América ver a su presidente (...) acusar falsamente a la gente de intentar robarse las elecciones¡", señaló.

Lo mismo hizo Fox News, el canal informativo referente del Partido Republicano. Una vez terminada la conferencia, desmintió las palabras de Trump. La ruptura dentro de ese canal se está haciendo más profunda: "No hemos visto nada que constituya un fraude o un abuso del sistema", decía el corresponsal de la Casa Blanca, John Roberts.

La diferencia de criterio en la programación de Fox News refleja la tensión informativa que se vive entre los periodistas de una empresa que tiene que decidir entre seguir apoyando la deriva del discurso de Trump o la verificación de sus acusaciones contra el sistema electoral.

Lo mismo hacía David Muir, el conductor del informativo más seguido del país con 8 millones de espectadores diarios. "Simplemente no se ha presentado evidencia en ninguno de estos estados de que existan votos ilegales", dijo por ABC.

La CBS, tercera en audiencia, arrancaba una verificación de datos mientras Trump terminaba su discurso y desmintió todas las acusaciones de "fraude" y "corrupción del sistema".

Más contundentes fueron los servicios informativos de la radio pública estadounidense, la NPR: "Trump de nuevo reclamó falsamente la victoria en las elecciones de 2020. No ha ganado. Los votos se siguen contando".

"Trump ha dicho sin pruebas que la elección ha sido corrupta y fraudulenta", publicaba Nicole Carroll, la editora de USA Today, uno de los diarios generalistas más leídos de Estados Unidos. The Washington Post, The New York Times y Los Ángeles Times también desmintieron al presidente.



Fuente:  pagina12.com.ar

miércoles, 21 de octubre de 2020

Facebook da un paso más en la lucha contra QAnon
La plataforma afirma que prohibirá cualquier elemento asociado a esta megateoría de la conspiración de ultraderechas. Aunque sus defensores están aprendiendo a esquivar los bloqueos y a moverse a otras redes, la medida ayudará a evitar una mayor difusión de noticias falsas de cara a las elecciones del país.
por Abby Ohlheiser | traducido por Ana Milutinovic


Alex Haney vía Unsplash


La noticia: Facebook anunció a principios de mes que eliminará "todas las páginas de Facebook, grupos y cuentas de Instagram que representen a QAnon, incluso si no contienen contenido violento". QAnon, la teoría de la conspiración pro-Trump que afirma que el presidente de Estados Unidos libra una guerra contra una red satánica secreta de pedófilos dirigida por los liberales, se ha convertido en una "omniconspiración" en los últimos meses. En consecuencia, se ha vuelto una poderosa vía para distribuir ideas conspiranoicas sobre una variedad de temas, incluida la desinformación sobre la pandemia y las elecciones presidenciales en EE. UU.

El contexto: La medida es mucho más agresiva que la prohibición más laxa que anunció en agosto. En aquel momento, Facebook había asegurado que eliminaría páginas, grupos y cuentas que contuvieran "discusiones sobre una posible violencia". En ese tiempo, QAnon había inspirado una creciente serie de actos destructivos, a veces violentos. En 2019, el FBI concluyó que QAnon era probablemente capaz de inspirar violencia.

¿Por qué ahora? QAnon floreció durante años en las redes sociales antes de este verano, y muchos críticos consideraron que la prohibición parcial de Facebook se quedaba corta y llegaba demasiado tarde. Pero probablemente fue impulsada por el asombroso crecimiento de la teoría en las redes sociales desde marzo (un estudio interno de Facebook de este verano encontró que los grupos asociados a QAnon tenían millones de miembros). El nuevo comunicado se refirió a la participación de QAnon en la difusión de noticias falsas peligrosas durante los incendios forestales en el oeste de Estados Unidos como otra razón para imponer una prohibición más agresiva. 

El investigador principal del Proyecto de Cambio Social y Tecnológico del Centro Shorenstein de la Universidad de Harvard (EE. UU.), quien ha estado analizando QAnon desde sus inicios, Brian Friedberg, escribió en un mensaje de texto que, aunque esta decisión probablemente alimentará los rumores entre los partidarios de QAnon de que esta equivale a una "interferencia electoral" contra Donald Trump, el momento elegido sugiere que, al actuar ahora, Facebook está tratando de "EVITAR una mayor difusión de la desinformación electoral" en las redes de distribución de QAnon. 

Los partidarios de QAnon lo esperaban: Aunque QAnon tiene una gran presencia en Facebook, sus creyentes están en la mayoría de las plataformas de redes sociales, y sus seguidores llevan un tiempo hablando de una represión más intensa en Facebook y Twitter. Tuvieron tiempo para prepararse y, hasta ahora, han ido aprendiendo estrategias para evitar las prohibiciones. Por ejemplo, la cuenta "Q" en el centro de la teoría de la conspiración recomendó recientemente a sus seguidores a "camuflarse" online y eliminar las referencias a "Q" o "QAnon" para evitar las prohibiciones dirigidas a esas palabras clave. La reacción inmediata de la comunidad al nuevo comunicado de Facebook, según Friedberg, fue usar Twitter para promover las ubicaciones alternativas para que los creyentes de QAnon se organicen online. La red social Gab, popular entre la extrema derecha, ya ha empezado a atraer a los seguidores de QAnon y a sus influencers.



lunes, 19 de octubre de 2020

Google, Amazon, Facebook y Apple acusadas de monopolio 
Cobran comisiones exorbitantes, imponen condiciones contractuales opresivas y extraen datos valiosos de millones de personas. La pandemia les permitió acelerar el crecimiento de sus negocios. Las cuatro compañías tienen en conjunto una cotización bursátil de 5 billones de dólares, equivalente a un tercio del valor combinado de las 100 empresas líderes Standard & Poors.
Por Esteban Magnani


La conclusión del informe dice que GAFA violan las leyes de la competencia afectando "la diversidad y libertad de prensa, la innovación y la privacidad". 


Google, Amazon, Facebook y Apple "se han transformado en un tipo de monopolios que vimos por última vez en la era de los barones del petróleo y los magnates del ferrocarril". Esta es una de las contudentes conclusiones del informe de casi 450 páginas que se presentó en el Congreso de los Estados Unidos. 

El informe del subcomité de Leyes antimonopolio, comerciales y administrativas, firmado por la mayoría demócrata, llevó 16 meses de elaboración, la lectura de más de 1,2 millones de documentos y 7 audiencias con cientos de competidores y clientes de esas corporaciones que explicaron los efectos de las políticas comerciales de estos gigantes. 

Los CEO de las firmas investigadas (incluido Jeff Bezos, de Amazon, el hombre más rico del mundo) fueron convocados a dar explicaciones con escasos resultados. "Durante casi seis horas presionamos por respuestas acerca de sus prácticas comerciales, incluida la evidencia del alcance con que han explotado, consolidado y expandido su poder sobre mercados digitales de manera anticompetitiva y abusiva. Sus respuestas fueron frecuentemente evasivas e indolentes y generaron nuevas preguntas acerca de si creen estar más allá del alcance de la supervisión democrática". 

No fue tarea fácil para los investigadores hacer la ingeniería inversa de un modelo de negocios muchas veces oculto dentro de algoritmos que funcionan como cajas negras y cuyo mecanismo no siempre es posible reconstruir.

La conclusión indica que estas grandes empresas tecnológicas violan las leyes de la competencia afectando a "la diversidad y libertad de prensa, la innovación y la privacidad". Este es el caso más grande desde que se aplicó este tipo de normativas a Microsoft en 1990. Para muchos especialistas fueron justamente las sanciones a esta empresa las que abrieron el espacio por donde innovaron Amazon, Google o Facebook.

Reglas de juego

Según el informe, "aunque estas firmas produjeron claros beneficios para la sociedad, el dominio de Amazon, Apple, Facebook y Google han tenido un precio. Estas firmas en general controlan el mercado al mismo tiempo que compiten en él, una posición que les permite escribir unas reglas de juego para los demás mientras ellos juegan con otras o llevar adelante su propia cuasi-regulación privada que no puede ser controlada por nadie excepto por ellos mismos". 

La solución sugerida es dividir estas empresas en distintas unidades para que no sean al mismo tiempo árbitros y jugadores de múltiples nichos comerciales en simultáneo. 

También piden que se aumente el poder de aplicación de regulaciones antimonopolio por parte del Estado. El candidato presidencial demócrata Joe Biden se declaró dispuesto a considerar la ruptura de estas empresas, aunque su candidata a vicepresidente Kamala Harris, senadora por California, tiene un largo vínculo (con donaciones de campaña incluidas) por parte de estas empresas y algunos la consideran la candidata de Silicon Valley.

El sector republicano del subcomité se negó a firmar el informe y elaboró su propia versión llamado "Una tercera vía para enfrentarse a las grandes tecnológicas". Los representantes aseguran que coinciden con una parte del diagnóstico, pero prefieren una aplicación selectiva de las leyes antimonopolio.

Guardiana

¿De qué se acusa concretamente a GAFA? 

Según el informe, "pese a que las cuatro corporaciones difieren de manera importante, al estudiar sus prácticas comerciales se revelaron problemas comunes. Primero, cada una de estas plataformas funciona como guardiana (gatekeeper) de un canal de distribución clave. Al controlar el acceso a los mercados estos gigantes eligen a los ganadores y los perdedores de nuestra economía. No solo ejercen un poder tremendo, sino que también abusan de él cobrando comisiones exorbitantes, imponiendo condiciones contractuales opresivas y extrayendo datos valiosos de la gente y los negocios que confían en ellos. En segundo lugar, cada plataforma utiliza su posición como guardiana para mantener su poder de mercado". 

Más adelante asegura: "El resultado es menos innovación, menos opciones para los consumidores y una democracia debilitada".

Facebook

El extenso informe luego se detiene en las particularidades de cada una de las empresas. Con respecto a Facebook se destacan las frecuentes compras de las startup que pudieran resultar en una competencia futura. El ejemplo paradigmático fue la compra de Instagram, una red que se visualizaba como una amenaza en caso de continuar su crecimiento.

Con esa política, señala el reporte, la "competencia al interior de su propia familia de productos es mayor que la competencia de cualquier otra empresa". 

Cabe recordar que Facebook tiene cuatro de las cinco aplicaciones más usadas en celulares del mundo: Whatsapp, Instagram, Messenger, además de Facebook propiamente dicha. La cantidad de datos acumulados a través de las distintas redes y servicios hace imposible a cualquier competidor entrar en el mismo sector del mercado. Y aún si encontrara un espacio libre donde crecer, corre serios riesgos de ser comprado o imitado por la red social.

Google

El informe puntualiza que Google monopoliza el mercado de búsquedas y la publicidad asociado a éstas. Al igual que en el caso de Facebook, la cantidad de datos que tiene y que le permiten afinar su servicio constituyen una barrera de entrada insalvable para cualquier competidor, lo mismo que su presencia por "default" en los dispositivos y navegadores. 

Por su control monopólico en el servicio de búsquedas pudo aumentar la cantidad de publicidad entre los resultados que ofrece y contenidos propios "borroneando la diferencia entre publicidades pagas y resultados orgánicos". De esta manera la empresa puede gestionar el flujo del tráfico según sus intereses particulares y cobrar a las empresas por darles al menos una parte del mismo. 

En la misma línea va el uso de Android, un sistema operativo que los fabricantes de dispositivos deben instalar tal como lo reciben. La alternativa de competir con un sistema propio parece tecnológica y comercialmente inviable.

Con estas prácticas puede hacer crecer sus otros servicios. Por ejemplo, Google Maps, que ya tiene el 80 por ciento del mercado navegación de mapas. Un documento interno filtrado explicaba el funcionamiento de "Android Lockbox", un software propio utilizado para monitorear el uso de aplicaciones de terceros y detectar eventuales competidores de manera temprana.

Amazon

En el caso de Amazon tuvieron mucho peso las declaraciones de "socios" que venden en esa plataforma que ya acapara cerca del 50 por ciento de las ventas online en Estados Unidos. 

Para alcanzar esa cuota de mercado Amazon fue adquiriendo a sus competidores directos pero también a los que estaban en mercados adyacentes, sumando más datos de clientes y aislándose de la competencia. 

De esa manera, la plataforma logró "un poder monopólico sobre los negocios pequeños y medianos que carecen de alternativas viables a Amazon para alcanzar a sus consumidores online". 

Los 2,3 millones de "socios" que ofrecen productos en la plataforma son considerados "competidores internos" en los documentos de la empresa. Algunos denunciaron las amenazas que sufren para aceptar condiciones más ventajosas para la corporación. Ese control le permitió "priorizar sus intereses y generar desventajas en sus competidores de maneras que socavan la competencia libre y justa". 

El conflicto de intereses resulta obvio en el informe y se está potenciando gracias a las recomendaciones del asistente virtual Alexa y toda la parafernalia de internet de las cosas asociada. Y si alguien se atreviera a desafiar a Amazon, tendría también que evitar el servicio en la nube de la corporación, Web Services, para asegurarse de que la información sensible no sea utilizada para perjudicarlo.

Apple

Es la más antigua de estas empresas y que fue mutando su modelo de negocios a lo largo de los años. Apple tiene su principal arma en el sistema operativo para celulares iOS que le permite controlar el acceso de cualquier software a cerca de cien millones de celulares. 

Quienes se resisten a sus comisiones (que llegan al 30 por ciento), como ocurrió recientemente con Fortnite, pueden sufrir bloqueos muy peligrosos para sus negocios.

El informe destaca que "Apple también usa su poder para explotar a los desarrolladores de apps por medio de una apropiación inadecuada de información sensible para competir y cobrar a los desarrolladores de apps precios más altos que los necesarios para resultar competitivos dentro del App Store".

Prensa

Uno de los múltiples mercados afectados por el comportamiento comercial de estas empresas es el periodístico con efectos palpables incluso para la democracia. 

Estas empresas pueden ofrecer publicidad más eficiente y a menor precio, ya que utilizan contenidos producidos por los usuarios por medio de búsquedas, posteos en redes o provenientes de de otras plataformas sin pagar nada por ellos. 

De esta manera, aseguran en el informe, "Google y Facebook tienen una exagerada influencia sobre la distribución y monetización de fuentes de noticias online confiables, socavando la calidad y disponibilidad de fuentes periodísticas de alta calidad".

Poder

Esta investigación no es la única que analiza el comportamiento de los colosos de Internet. En tiempos recientes varias de ellas pagaron multas millonarias por violaciones de leyes y normativas. La cifra más alta, 5000 millones de dólares, la pagó Facebook por el caso de Cambridge Analytica. 

Las cuatro corporaciones son una fuente inagotable de noticias por denuncias públicas y filtraciones que ponen en evidencia que el liderazgo tecnológico no es un obstáculo para llevar adelante antiguas prácticas comerciales desleales y abusivas. Además, con dificultades para seguir creciendo a la misma tasa histórica que estaban acostumbradas, intentan expandirse hacia otros nichos más dinámicos como el financiero o el audiovisual. 

Los sectores que ven con preocupación este avance y no quieren sufrir como los medios de comunicación masiva, seguramente piden más regulaciones para estas corporaciones que suelen arrasar con la competencia creando una kill zone, como la llama el informe. En los últimos meses, además, la pandemia les permitió acelerar nuevamente su crecimiento.

El Congreso de los Estados Unidos se enfrenta contra cuatro compañías cuyo cotización bursátil sumada es de 5 billones de dólares, que representan un tercio del valor combinado de las 100 empresas líderes Standard & Poors. 

Si su poder económico y de lobby resultan monstruosos, su poder para administrar el flujo de la información que circula es aún mayor. Con ese informe y si se toman medidas puede ser una de las últimas oportunidades de someter a GAFA a la normas básicas de la competencia y de la democracia.



Fuente:  pagina12.com.ar

domingo, 18 de octubre de 2020

"El dilema de las redes sociales" | 3 cambios para retomar el control sobre tu vida en las redes según Justin Rosenstein, creador del botón "Me gusta" en Facebook
por Lucía Blasco


Justin Rosenstein, creador del botón "Me gusta en Facebook", es una de las voces más prominentes en el documental de Orlowski.


Estamos siendo manipulados.

Es la gran conclusión del nuevo documental de Netflix "El dilema de las redes sociales", que expone, a través de las voces de distintos expertos, cómo los gigantes tecnológicos manipulan la psicología humana e influencian nuestros comportamientos.

Una de las más prominentes es la de Justin Rosenstein.

El programador, empresario y filántropo estadounidense trabajó en Google y en Facebook, donde diseñó el famoso botón "me gusta". Es el cofundador de Asana -una aplicación para mejorar la productividad- y de One Project, una iniciativa global sin fines de lucro "para diseñar e implementar nuevas formas de gobernanza y economía" (con base en la colaboración).

Las mayor preocupación de Rosenstein sobre los sistemas de tecnología actual es "cómo explotan y manipulan nuestras mentes", le cuenta a BBC Mundo en conversación telefónica.

"Los sistemas que usamos hoy en día están quebrantados; responden a los intereses de las compañías involucradas. La idea se basa en que el usuario no es el cliente, sino el producto. Y su permanencia en las redes se vende a los anunciantes".

"Pero podemos cambiar la dirección hacia la que va la sociedad", añade, optimista.

"Yo espero que la gente se dé cuenta de que tiene más opciones. Una vez que eres consciente de lo que hace la tecnología -cómo nos está polarizando, desinformando y afectando- tú, como individuo , puedes retomar el control sobre tu vida en las redes, puedes empoderarte y tomar decisiones".

¿Y cómo?

"Teniendo conversaciones como la que estoy teniendo contigo ahora sobre cuáles son los daños potenciales de las tecnologías que usamos, cómo estamos siendo manipulados y cómo podemos cambiar nuestro comportamiento, empezamos a cuestionar las cosas. Yo espero que veamos el comienzo de un renacimiento cultural", añade el matemático.

¿Cómo nos manipulan quienes manejan las redes sociales?

Rosenstein ofrece tres tipos de soluciones o recomendaciones: unas tienen que ver con cómo usas la tecnología; otras, con cómo te comportas; y otras con cómo actúas en sociedad sociedad.

1. Los cambios "básicos": desactiva las notificaciones

Respecto al uso del dispositivo, Rosenstein recomienda varias cosas "muy básicas".

Se trata de cambios que tienen que ver con cómo usamos la tecnología. "Por ejemplo, desinstalar aplicaciones del teléfono, moderar el tiempo de uso o desactivar las notificaciones", explica.

La cuestión clave para Rosenstein que es que comprendamos que las redes sociales ganan poder cuanto más tiempo pasamos en ellas, y que está en nuestra mano (literalmente, de hecho) evitar que eso ocurra.

"Es como si llevara todo el tiempo en el bolsillo una deliciosa galleta de chocolate. Si la comiera, ganaría peso que no quiero. Se trata de alejarte de algo altamente adictivo".

"Pero hay otros cambios mucho más profundos que tienen que ver con cómo interactuamos entre nosotros", añade Rosenstein.

2. Cambios de comportamiento: cuanto más presente estás, menos rentable eres

"Debemos pasar más tiempo con otras personas, escucharnos y comprendernos para que seamos capaces de reconocer cómo la tecnología (los algoritmos) refuerza nuestros propios sesgos".

El tiempo que pasas usando el teléfono depende de ti, pero también cómo interactúas con quienes te rodean.

"Sin duda, podemos cambiar nuestro comportamiento", dice Rosenstein.

Una de las claves de ese cambio, dice Rosenstein, es enfocarnos en estar más presentes. "Cuando estamos presentes nos sentimos satisfechos; no necesitamos ningún software ni la necesidad de comprar nada. Por eso el que estemos presentes no les resulta rentable a las redes sociales".

"Hay algunas cosas que pueden ayudarnos mucho, como la meditación o practicar la atención plena".

Otra clave es cómo nos comportamos con los demás y no asumir que todo lo que leemos en internet es cierto. "Debemos ser mucho más humildes sobre nuestra propia capacidad de comprender la realidad y darnos cuenta de que muchas cosas que nos han contado puede que no sean ciertas", señala.

"También ser más abiertos a otras perspectivas, a por qué otros piensan distintos. No todos ven la misma información. Hay que ser más compasivos y cuestionar nuestras propias creencias. No perder la curiosidad, escuchar con atención. Y construir relaciones con personas que tienen otros puntos de vista".

Sin embargo, el ingeniero dice que "cambiar nuestro comportamiento como individuos o con los demás no es suficiente" porque "también tiene que cambiar el sistema".

3. Los cambios como sociedad

"Cambiar los comportamientos individuales no es suficiente. Incluso aunque estemos muy atentos y nos esforcemos mucho en usar nuestra atención consciente, siempre hay maneras en que la inteligencia artificial puede ser más lista sin que seamos conscientes de ello", explica el exingeniero de Facebook.

De esa manera, la tecnología puede cambiar nuestras perspectiva y nuestros comportamientos sin que ni siquiera nos demos cuenta, añade.

"Por eso el cambio individual no basta; tenemos que demandar cambios a las empresas tecnológicas. Y no solo eso, sino también reclamar regulaciones a los gobiernos para reducir los daños que causan y haya más transparencia y responsabilidad".

"Estos sistemas no pueden dejarse en manos de grandes corporaciones que tratan de maximizar sus beneficios o el tiempo que pasamos usando su tecnología. Todo esto nos afecta de manera muy profunda y es muy importante que si queremos salvar nuestra democracia, cambiemos la gestión de las redes sociales y qué las incentiva".

Rosenstein propone una junta de representantes de ciudadanos, de manera que los ejecutivos de esas empresas deban dar parte a esos comités, responsables de establecer objetivos acordes con la democracia.

"La tecnología tienen que estar, al menos conceptualmente, en manos de la gente".

¿De qué más habla el documental?

"El dilema de las redes sociales" es un docudrama de 93 minutos, dirigido por el premiado cineasta estadounidense Jeff Orlowski, en el que Rosenstein y otros importantes actores del mundo tecnológico -Tristan Harris (ex Google), Jeff Seibert (ex Twitter), Bailey Richardson (ex Instagram), Tristan Harris (ex Google) y Justin Rosenstein (ex Facebook) o Lynn Fox (ex Apple)- explican cómo funciona el lado oscuro de las redes sociales.

"Muchas de las cosas que se cuentan en 'El dilema de las redes sociales' no son nuevas", explica Rosenstein. "Pero he visto reacciones de mucha gente y es increíble cuántos dicen que eran cosas que no sabían antes".

Con un impresionante puntaje del 90% en la página web de críticas de cine Rotten Tomatoes y reseñas positivas de varios medios de alto perfil, como Variety, Financial Times y Hollywood Reporter, la película está dando mucho de qué hablar.

En Twitter se leen comentarios de espectadores que opinan que es "más perturbador que una película de terror"e incluso lo comparan con un capítulo de la distópica serie "Black Mirror". Otros dicen que les provoca "ansiedad y ganas de tirar el teléfono" o que sintieron "un ansia repentina" por eliminar todo lo que tienen (publicado) en internet.

Quienes lo critican dicen que el hecho de que hable sobre "despertar al Matrix" de las redes sociales no les excluye de formar parte de ese mundo.Otros critican que haya escenas de ficción en una narrativa que aspira a ser informativa (en realidad, es un docudrama), o que, paradójicamente, se haya publicado en Netflix, cuyo algoritmo se nutre de la información de los usuarios.

El hecho de que el documental haya sido número uno (en septiembre) en la plataforma lo convierte en un éxito. (Y además es la primera vez que un documental se coloca como lo más visto).

Pero para Rosenstein, el verdadero éxito es haber logrado que muchos "hayan abierto los ojos al alcance del problema sobre cómo funcionan las redes sociales" y cambien su perspectiva sobre cómo las usan o sobre la confianza que depositan en lo que ven por internet.

"Así como la pornografía es una imitación de la intimidad y ciertos tipos de comida rápida son una imitación de la nutrición, las redes sociales se adentran en estructuras internas del cerebro que activan impulsos básicos que nos resulta muy difícil controlar", cuenta Rosenstein.

"Nos volvemos adictos a eso sin ni siquiera darnos cuenta, es como un truco psicológico. La tecnología puede tener usos fabulosos, el problema es cómo se aplica".



sábado, 17 de octubre de 2020

YouTube eliminará contenidos falsos o engañosos sobre las vacunas contra el coronavirus


Imagen: AFP


YouTube, en sintonía con lo anunciado este martes por Facebook, aseguró que eliminará contenidos que contradigan el consenso de los expertos sobre las vacunas contra el coronavirus, en una actualización de sus políticas para impedir la difusión de información errónea o engañosa en relación con la pandemia. 

Según informó este miércoles la compañía, que es propiedad de Google, con esta medida Youtube se prepara para el eventual lanzamiento de una o más vacunas y la información equívoca que puede surgir desde los sectores más escépticos que desconfían de su utilidad. 

La intención, puntualizaron las autoridades, "es eliminar las afirmaciones sobre las vacunas covid-19 que contradicen el consenso de expertos de las autoridades sanitarias locales de la Organización Mundial de la Salud".

Por ello, el contenido que podrá ser borrado será aquel que incluya afirmaciones que den a entender que las vacunas pueden causar la muerte o la infertilidad, que son vehículos para implantar microchips, u otro tipo de información engañosa. 

Desde febrero, aseguró la empresa, se han borrado de YouTube más de 200.000 videos con información "peligrosa o engañosa" sobre el virus, incluidas afirmaciones no verificadas sobre transmisión o tratamientos sin fundamento.

Este martes, Facebook tomó una decisión similar al anunciar la prohibición de los anuncios que desalienten a las personas a vacunarse. "Si un anuncio desalienta explícitamente a alguien de recibir una vacuna, lo rechazaremos", declararon ayer el jefe de salud de Facebook, Kang-Xing Jin, y el director de gestión de productos, Rob Leathern.

Cabe destacar que estas medidas se conocen luego de que los gigantes tecnológicos fueran acusados de permitir que prosperen los movimientos antivacunas.



viernes, 2 de octubre de 2020

Un estudio revela que Trump es el principal factor de desinformación sobre Covid-19
El informe publicado por la Universidad de Cornell y financiado por la Fundación de Bill y Melinda Gates, asegura que se identificaron más de 522.400 artículos con información falsa sobre el coronavirus.




El presidente estadounidense Donald Trump es probablemente el mayor factor de desinformación sobre el covid-19, según un estudio de la Universidad de Cornell, financiado en parte por la Fundación de Bill y Melinda Gates.

Un equipo de la Alianza de Cornell para la Ciencia analizó unos 38 millones de artículos publicados en inglés, entre el 1 de enero y el 26 de mayo de 2020, en Estados Unidos, Reino Unido, India, Irlanda, Australia y Nueva Zelanda, así como en algunos otros países de África y Asia.

De ellos, se identificaron más de 522.400 artículos con información falsa sobre el coronavirus, un fenómeno llamado “infodemia” por la Organización Mundial de la Salud.

Asimismo, se calculó el impacto de estos artículos en las redes sociales, con más de 36 millones de interacciones, tres cuartas partes en Facebook.

En total, se identificaron once categorías de información falsa, desde teorías de la conspiración -que el virus fue creado para crear un nuevo orden mundial; que se trata de un arma biológica diseminada por un laboratorio chino; que es una enfermedad ligada al magnate Bill Gates; que el virus fue creado para regular a la población mundial, entre otras- hasta curas milagrosas.

Éstas últimas fueron, por lejos, las más populares, con 295.351 artículos, y los comentarios de Trump fueron responsables de un repunte significativo en esta categoría, en particular la posibilidad de una inyección de desinfectante para combatir la enfermedad, como dijo en una conferencia de prensa el 24 de abril.

Asimismo, hubo picos similares cuando promovió el uso de hidroxicloroquina, un tratamiento cuya efectividad no ha sido probada.

“Por tanto, llegamos a la conclusión de que el presidente de Estados Unidos fue sin duda el factor más importante de desinformación” sobre el covid-19, indicaron los investigadores.

“Si la gente recibe información engañosa a través de informes no científicos y no corroborados sobre la enfermedad, puede ocurrir que sean menos propensos a seguir las recomendaciones oficiales y a propagar aún más el virus”, dijo Sarah Evanega, quien encabezó el estudio.

“Uno de los aspectos más interesantes en la recolección de datos fue descubrir la impresionante cantidad de información falsa directamente relacionada con las declaraciones de un pequeño número de individuos”, dijo por su parte Jordan Adams, coautor de la investigación y analista de datos de Cision Insight.



Fuente:  losandes.com.ar

viernes, 18 de septiembre de 2020

Denuncian a Facebook por espiar a usuarios de Instagram a través de la cámara


Brittany Conditi acusó a Facebook de recolectar “datos lucrativos y valiosos de sus usuarios a los que de otra forma no habría tenido acceso”. 


Una usuaria de Instagram en Estados Unidos denunció a Facebook Inc., dueña de esta red social, por recabar ilegalmente datos personales con fines lucrativos, luego de que se revelara el pasado mes de julio que el software de Instagram accedía a la cámara de los celulares cuando no se estaba utilizando.

La demanda fue presentada este jueves por Brittany Conditi, de Nueva Jersey, en un tribunal federal de San Francisco. Allí acusó a Facebook de recolectar “datos lucrativos y valiosos de sus usuarios a los que de otra forma no habría tenido acceso”, según consigna el portal Bloomberg.

A su vez, la denuncia argumenta que se trata de una práctica intencional, ya que “al obtener datos extremadamente privados y personales de sus usuarios”, Instagram y Facebook tienen la posibilidad de obtener “información valiosa e investigación de mercado”.

En julio, usuarios de Instagram detectaron que en la versión beta de iOS 14 de esta red social se activaba la cámara y el micrófono cuando la persona estaba navegando por el “feed” sin que hiciera uso de las funciones que requieren estos dos elementos del teléfono.

En aquel entonces, Facebook respondió que se trataba de una falla técnica y que estaba trabajado para solucionarla, por lo que prometió lanzar una actualización que reparara el error.

En agosto, la red social recibió otra acusación en la que se le atribuyó el haber utilizado tecnología de reconocimiento facial para recolectar de forma ilegal datos biométricos de sus más de 100 millones de usuarios de Instagram. Sin embargo, Facebook negó la acusación y aseveró que Instagram no usa este tipo de tecnología.


miércoles, 16 de septiembre de 2020

Facebook: la exempleada que denuncia la responsabilidad de la red en las campañas de manipulación de todo el mundo
por Jane Wakefield


Las noticias falsas encuentran un espacio de difusión en Facebook.


Las cuentas de noticias falsas en Facebook han estado manipulando las campañas electorales en todo el mundo.

Así lo denunció una exempleada de la red social en un memorando de 6.600 palabras que envió a los que fueron sus compañeros de trabajo.

La científica de datos Sophie Zhang dijo que tomó decisiones sin supervisión "que afectaron a presidentes".

"Tengo las manos manchadas de sangre", escribió en la comunicación, parte del cual fue publicada por el medio estadounidense Buzzfeed.

En respuesta, Facebook dijo que estaba trabajando para frenar a los malos usuarios que abusan de la red social y terminar con el comportamiento no auténtico.

Engaño a la ciudadanía

En la comunicación, parte de la cual fue publicada por Buzzfeed sin su permiso, Zhang habló de abuso y engaño a la población.

"En los tres años que estuve en Facebook, encontré múltiples intentos descarados de gobiernos extranjeros de abusar de nuestra plataforma a gran escala para engañar a su propia ciudadanía y crear noticias internacionales en múltiples ocasiones", escribió Zhang.

"Yo personalmente tomé sin supervisión decisiones que afectaron a presidentes y tomé medidas para hacer cumplir la ley contra tantos políticos prominentes a nivel mundial que perdí la cuenta", agregó.


Muchas elecciones en varios países fueron manipuladas por bots, afirma la excientífica de datos de Facebook.


Buzzfeed dijo que había compartido solo aquellas partes de su comunicado que eran de interés público e informó que Zhang rechazó un paquete de indemnización de US$64.000 que le ofrecieron con la condición de que no compartiera su memo internamente.

En respuesta, Facebook dijo que estaba trabajando para combatir esos abusos.

"Hemos construido equipos especializados, estamos trabajando con los principales expertos, para evitar que malos actores abusen de nuestros sistemas, lo que resultó en la eliminación de más de 100 redes por comportamiento no auténtico coordinado", afirmó la compañía.

"Es un trabajo muy complicado que estos equipos realizan a tiempo completo. Trabajar contra el comportamiento no auténtico coordinado es nuestra prioridad, pero también estamos abordando los problemas del spam y la participación falsa", añadió.

"Investigamos cada tema con detenimiento, incluidos los que plantea Zhang, antes de tomar medidas o salir y hacer afirmaciones públicamente como empresa", dijo Facebook.

Ejemplos de trabajos a los que la exempleada hace referencia
  • Facebook tardó nueve meses en actuar ante la información sobre el uso de bots (robots) para promocionar al presidente Juan Orlando Hernández de Honduras.
  • En Azerbaiyán, el partido político gobernante utilizó miles de bots para acosar a la oposición.
  • 10,5 millones de reacciones falsas y fans fueron retirados de políticos de alto perfil en Brasil y Estados Unidos en las elecciones de 2018.
  • Un investigador de la OTAN le dijo a Facebook que había visto actividad rusa en una figura política estadounidense de alto perfil, que Zhang eliminó.
  • Se descubrieron cuentas de bot en Bolivia y Ecuador, pero el problema no se priorizó debido a la carga de trabajo.
  • Zhang encontró y eliminó 672.000 cuentas falsas que actuaban contra los ministerios de salud de todo el mundo durante la pandemia.
  • En India, Zhang trabajó para eliminar una red políticamente sofisticada de más de 1.000 usuarios que trabajan para influir en las elecciones locales en Delhi.
"Facebook proyecta una imagen de fuerza y competencia al mundo exterior... pero la realidad es que muchas de sus acciones son accidentes casuales y descuidados", dice Zhang en el mensaje.

Ella asegura que el hecho de que tuvo que tomar innumerables decisiones sobre muchos países diferentes afectó a su salud y la dejó sintiéndose responsable cuando se produjeron disturbios civiles en lugares que no había priorizado la acción.


Mark Zuckerberg admitió que su empresa tardó en comprender la manipulación política.


Sus revelaciones se producen apenas una semana después de que el exingeniero de Facebook Ashok Chandwaney acusó a la empresa de beneficiarse del odio.

Carole Cadwalladr, una periodista de Reino Unido que expuso el escándalo de Cambridge Analytica, tuiteó: "La velocidad y la escala del daño que Facebook está haciendo a las democracias de todo el mundo es realmente aterradora".

Análisis de Marianna Spring, reportera especializada en desinformación

Este memorando explosivo confirma las preocupaciones que se han planteado durante mucho tiempo sobre la capacidad de Facebook para abordar la interferencia extranjera y las campañas de desinformación.

Pero aunque la mayoría de los ojos han estado puestos en la injerencia rusa en la política estadounidense después de las elecciones de 2016, el testimonio de esta exempleada dirige la atención a los eventos democráticos más allá de Occidente.

El fracaso de Facebook para abordar la desinformación en otros idiomas ha sido objeto de escrutinio durante la pandemia y esta nueva información alega que antes ha tenido problemas para abordar campañas de interferencia en países de habla no inglesa.

El comunicado también genera grandes preocupaciones sobre la enorme responsabilidad otorgada a los moderadores junior de Facebook, cuyas decisiones podrían afectar los eventos democráticos, los resultados políticos y la vida de las personas en todo el mundo.

Sin duda, esto aumentará las preocupaciones sobre el trabajo de Facebook para abordar las campañas de interferencia y desinformación a medida que se acercan las próximas elecciones estadounidenses. Pero debería recordarnos que Facebook juega un papel en los eventos democráticos fuera de Estados Unidos.



Fuente: bbc.com

jueves, 3 de septiembre de 2020

En cuarentena, el grooming aumentó el 30 % en Argentina
Advierten que Tik Tok es la nueva vía utilizada para acosar niños, niñas y adolescentes. Pedirán mejoras de seguridad en la aplicación.
por Florencia Martínez del Río


Foto: Junior Vásquez


Desde que comenzó el aislamiento social preventivo, el delito de grooming aumentó el 30 % en Argentina. La hiperconectividad hizo que el acoso sexual a niños, niñas y adolescentes a través de internet se incrementara durante la pandemia de COVID-19. La ONG Grooming Argentina manifestó su preocupación por los casos ocurridos mediante Tik Tok, la aplicación con mayor cantidad de descargas en lo que va de 2020. Hernán Navarro, director de esta organización, comentó a Unidiversidad que se reunirán con autoridades de esta red social para plantear este problema y trabajar en soluciones que protejan a los menores.

Este delito es la acción deliberada de un adulto de acosar sexualmente a chicos y chicas mediante el uso de Internet, a través de comunicaciones electrónicas, telecomunicaciones o cualquier otra tecnología de transmisión de datos, como redes sociales, páginas web, aplicaciones de mensajerías como WhatsApp, entre otras. Los adultos que realizan grooming suelen generar un perfil falso, haciéndose pasar por un niño o una niña, para lograr una relación de confianza con la víctima.

Esta modalidad se incrementó en el 30 % desde que comenzó el aislamiento social, advirtió Grooming Argentina, organización creada para trabajar en la prevención, concientización y erradicación de este delito.

Durante la pandemia, la pedofilia encontró en la tecnología un vehículo de contacto que le facilitó, como nunca, acceder a sus víctimas que, por estar aisladas en sus hogares, tuvieron y tienen mayor exposición al uso de celulares y computadoras. 

Una de las mayores preocupaciones son las redes sociales, ya que son el lugar donde se agrupan posibles víctimas. El groomer, como se lo llama técnicamente, va en busca de los espacios virtuales donde están los niños, niñas y adolescentes. Por eso, muchos casos ocurrieron a través de Tik Tok, señalaron desde la ONG, porque es la aplicación con mayor cantidad de descargas en lo que va de 2020. Si bien la usan personas de todas las edades, esta fue la app que más "pegó" entre los más jóvenes, atraídos por la posibilidad de subir pequeños videos de hasta 60 segundos.

"Venimos denunciando varios casos ocurridos a través de Tik Tok. Mañana nos reuniremos con autoridades de la aplicación para transmitirles nuestra preocupación por la aparición de casos. Vamos a plantear la posibilidad de incorporar cuestiones en materia de seguridad y, a partir de ahí, trabajar mancomunadamente para la protección de nuestros niños, niñas y adolescentes", afirmó Hernán Navarro, director de Grooming Argentina.

Uno de los casos más resonantes y recientes fue el de un hombre identificado con las iniciales EGV, de 34 años, que utilizó a su hijo de 13 para identificar a su víctima de 11: creó un perfil falso en la red social Tik Tok, comenzó a seguirla y hablarle, se hizo pasar por un chico de 12 años y, en al menos dos oportunidades, le envió fotos de sus partes íntimas y le pidió a ella que hiciera lo mismo. Además, el groomer llegó a pedirle tres veces que concretaran un encuentro con el fin de abusarla. La investigación comenzó en diciembre pasado y del escrito de la causa surge que el delincuente mantuvo contactos con la nena hasta al menos el 23 de agosto. Tras la detención del agresor sexual, este se negó a declarar ante los fiscales Claudio Oviedo y Marisa Monti, titulares de la UFI N.º 5 del Departamento Judicial Morón, y quedó detenido.

Según un informe de la ONG difundido en junio, el 56,4 % de los chicos y chicas de entre 9 y 17 años hablan con personas desconocidas en internet. Además, al 35 % alguna vez le pidieron que enviara fotos desnudos o con poca ropa, y el 33 % recibió imágenes o videos de contenido sexual de un desconocido que lo contactó por la red. El relevamiento indicó también que el 48,9 % de los niños, niñas y adolescentes fue agregado a un grupo de WhatsApp por desconocidos sin su consentimiento. 

En Mendoza, según esta investigación, los datos son los siguientes: el 52,4 % habla con desconocidos de manera virtual y el 48,6 % fue víctima de intromisión, es decir que agregado a un grupo de mensajería sin su consentimiento.

Recomendaciones

Para la prevención de esta u otras problemáticas es importante generar espacios de diálogo y escucha con ellos, para fortalecer un vínculo de confianza que les permita hablar de aquellos temas que les preocupan o para pedir ayuda.
  • Enseñales a realizar un uso responsable de Internet y de las redes sociales. Brindales información sobre los riesgos y aclarales cómo funcionan las herramientas de protección.
  • Explicales que no deben compartir claves, información o imágenes comprometedoras por medios electrónicos, porque lo que se sube a Internet no se borra nunca.
  • Configuren juntos las opciones de privacidad en las redes sociales para determinar qué información será accesible para los demás, evitando usar sus nombres completos y datos personales. Conversá con ellos sobre el concepto de privacidad y generá con ellos un pensamiento crítico a la hora de publicar información o imágenes en las redes.
  • Prestá atención a los cambios de conducta o humor de tu hijo/a. Según la edad, vayan definiendo hábitos de uso de redes e internet, con diferentes niveles de participación y acompañamiento.
  • Generá puntos de encuentro relacionados con las redes o sitios de internet. El diálogo y la confianza con los chicos siempre es lo más importante.

Para recibir información y asesoramiento y/o hacer denuncias, llamá al 134.

En caso que suceda este delito, el Gobierno aconseja:
  • Hablá con tu hijo, acompañalo en este proceso sin culparlo ni cuestionarlo.
  • No borres ningún contenido de la computadora o teléfono celular.
  • No denuncies al perfil acosador en la red social o plataforma web.
  • No amenaces, increpes ni mantengas una conversación con el abusador.

Para obtener más información sobre qué es el grooming, cómo actúan los agresores y cómo prevenirlo, ingresá a este enlace.



martes, 25 de agosto de 2020

Las visitas a noticias falsas sobre coronavirus se disparan en Facebook
Las páginas que contribuyen a la desinformación sanitaria consiguieron casi 500 millones de visitas durante abril. Pese a que la red social afirmó que mejoraría la verificación de las noticias, el grupo de derechos humanos Avaaz reclama que modifique su algoritmo para que sean menos visibles.
por Charlotte Jee | traducido por Ana Milutinovic 


Associated Press


La noticia: las páginas que difunden desinformación sanitaria obtuvieron unas 3.800 millones de visitas en Facebook este año hasta el mes de mayo, según un reciente análisis del grupo de derechos humanos Avaaz. El estudio también indica que las vistas a esas páginas alcanzaron un máximo de casi 500 millones solo en abril de 2020, justo cuando la pandemia crecía rápidamente a nivel mundial. El contenido de diez sitios web que propagan noticias falsas recibió casi cuatro veces más visitas estimadas en Facebook que las publicaciones de diez fuentes confiables, como la Organización Mundial de la Salud y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. En total, Avaaz estudió 82 páginas web de desinformación sobre salud, como campañas antivacunas, afirmaciones de falsas curas para el coronavirus (COVID-19), en ocasiones letalmente peligrosas, y artículos que aseguran de forma engañosa que el número de muertos por coronavirus se ha exagerado.

El impacto: este no es un problema sin víctimas. Un estudio publicado la semana pasada en la revista American Journal of Tropical Medicine and Hygiene descubrió que al menos 800 personas en todo el mundo podrían haber muerto y 5.800 haber acabado ingresadas en un hospital como resultado de la desinformación sobre el coronavirus en los primeros tres meses de 2020, muchas de ellas después de ingerir metanol o productos de limpieza que creían que podían curar la COVID-19. 

¿Qué se puede hacer al respecto? Una solución podría ser que Facebook simplemente prohibiera los sitios web que Avaaz ha identificado en su plataforma. La compañía prometió en abril empezar a adoptar un enfoque más proactivo para verificar los hechos y eliminar la información errónea sobre la COVID-19, pero todo se quedó en afirmar que alertaría a las personas que han visto o compartido falsedades. 

En su informe, Avaaz señala que dar este paso podría empezar a reducir el número de personas que creen en la información errónea. También considera que Facebook debería "desintoxicar" su algoritmo degradando esas publicaciones en las noticias de los usuarios, disminuyendo así su alcance. "Facebook aún tiene que aplicar de manera efectiva estas soluciones a la escala y con la sofisticación necesaria para vencer esta infodemia, teniendo en cuenta los repetidos llamamientos de los médicos y expertos en salud", concluye el informe.

Respuesta de Facebook: un portavoz de la compañía afirmó que desde abril hasta junio de este año la empresa ha aplicado indicaciones de advertencia a 98 millones de piezas de información errónea sobre la COVID-19. "Compartimos el objetivo de Avaaz de limitar la desinformación, pero sus hallazgos no reflejan las medidas que hemos tomado para evitar que se extienda en nuestros servicios", señala.